Las grandes empresas y/o las muy intensivas en el uso de vehículos, suelen tener en plantilla a un «gestor de flotas» que se encarga de esta y otras gestiones relacionadas con los vehículos de la empresa.

En las PYMES, en cambio, esta tarea suele recaer en perfiles con un coste hora/empleado elevado (gerentes, directores funcionales: financiero, compras…). A lo que hay que sumar el coste de oportunidad de todo ese tiempo no dedicado a la misión del puesto. El coste más elevado es, no obstante, el derivado de una decisión subóptima.

En la actualidad, la tendencia en gestión corporativa es la externalización de actividades secundarias o que no forman parte del día a día de las empresas, lo que les permite mantener el foco en su core business y ser más eficientes. Desde The Car Broker queremos brindarles la posibilidad de externalizar los procesos de compraventa de sus vehículos, maximizando la eficiencia y el rendimiento de cada operación.